El director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Rándall Zúñiga, ha instado a los diputados a crear un registro de ofensores sexuales que contenga información y muestras de ADN de personas condenadas por este tipo de delitos, así como de aquellos que cumplan penas mayores a cuatro años de cárcel por cualquier crimen. Actualmente, la base de datos del OIJ se alimenta a medida que se detiene a personas, pero no incluye a aquellos delincuentes que ya están en el sistema penitenciario.
Zúñiga explicó que este registro permitiría al OIJ monitorear a los ofensores sexuales para determinar su probabilidad de reincidir en delitos contra las mujeres. Sin embargo, enfatizó que este registro no se utilizaría para señalar públicamente a las personas, sino que sería únicamente para fines de inteligencia.
El director del OIJ hizo hincapié en que la creación de este registro ayudaría a prevenir nuevos delitos sexuales, permitiendo identificar a los agresores y detenerlos antes de que cometan más crímenes. Sin embargo, tanto él como el fiscal general, Carlo Díaz, afirmaron que no cuentan con los recursos necesarios para atender el creciente número de denuncias de violencia contra las mujeres en el país.
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