El huracán Beryl se fortaleció rápidamente y alcanzó la categoría 5 "potencialmente catastrófica" la noche del lunes, provocando devastación en varias islas del sureste del Caribe. Con vientos máximos sostenidos de 260 kilómetros por hora, Beryl se convirtió en la tormenta de categoría 5 más temprana registrada en el Atlántico, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC).
Impacto en el Caribe
El primer ministro de Granada, Dickon Mitchell, describió la situación en Carriacou, una isla de Granada, como devastadora: “En media hora, Carriacou fue devastada”. San Vicente y las Granadinas también sufrieron significativamente, con el primer ministro Ralph Gonsalves reportando al menos una muerte y una "inmensa destrucción" en las islas Union, Mayreau y Canouan. Gonsalves detalló que el 90% de las casas en Union Island fueron dañadas o destruidas.
Advertencias y Consecuencias
Wilfred Abrahams, ministro de Asuntos Públicos de Barbados, instó a la población a no salir de sus hogares hasta recibir autorización. Las autoridades también advirtieron sobre los peligros de los vientos catastróficos y las marejadas ciclónicas potencialmente mortales que acompañaron al huracán.
Las calles de islas como Santa Lucía y Granada quedaron llenas de escombros, incluyendo árboles caídos, cables eléctricos y otros desechos arrastrados por los vientos de hasta 240 km/h. En Barbados, Vichelle Clark King expresó su dolor: "Ahora mismo tengo el corazón destrozado", mientras describía la capital, Bridgetown, llena de arena y agua.
Trayectoria de Beryl
Beryl continuaba su paso destructivo por el sureste del Caribe la tarde del lunes, con una trayectoria prevista hacia el sur de Jamaica y la península de Yucatán en México para el jueves, aunque debilitándose a una tormenta de categoría 1. A pesar de esta disminución esperada en su intensidad, la devastación ya causada en varias islas caribeñas ha sido inmensa.
Efectos en Costa Rica
Los efectos indirectos del huracán Beryl se prevén más notorios en Costa Rica entre el miércoles y viernes, según los análisis meteorológicos. Estos efectos incluyen fuertes lluvias y posibles inundaciones, aunque no se espera un impacto directo del huracán en el país.
El huracán Beryl ha dejado una estela de destrucción en su paso por el Caribe, subrayando la necesidad de preparación y respuesta ante desastres naturales en la región. Las autoridades continúan evaluando los daños y brindando asistencia a las comunidades afectadas.
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